En Centro de Ofibodegas entendemos que uno de los factores clave al adquirir una bodega es dimensionar correctamente el espacio para maximizar el retorno de la inversión. El tamaño de la bodega influye directamente en costos fijos (compra, mantenimiento, impuestos) y variables (operación, personal, energía), así como en la capacidad de generar ingresos adicionales. A continuación, analizamos en detalle cómo afecta el tamaño de una bodega al retorno de la inversión, señalando ventajas y posibles desventajas de distintos rangos de metros cuadrados, y vinculándolo con los proyectos que ofrecemos para ayudarte a encontrar la mejor opción según tus objetivos.
1. Costos iniciales y apalancamiento del capital
1.1 Precio por metro cuadrado
- Bodegas pequeñas (100–200 m²): Su inversión inicial suele ser más baja en comparación con naves grandes, lo que facilita la entrada a pequeños empresarios con capital limitado. Sin embargo, el precio por metro cuadrado es relativamente más alto, pues los desarrolladores buscan compensar menores ventas totales sin incentivos de compra por volumen.
- Bodegas medianas (200–500 m²): Representan un punto intermedio interesante. El precio por metro cuadrado suele ser menor que en módulos pequeños, permitiendo un mejor apalancamiento del capital. Además, son versátiles para negocios que manejan volúmenes moderados de inventario.
- Bodegas grandes (500 m² en adelante): Ofrecen precio competitivo por metro cuadrado y economías de escala, pero requieren una inversión significativa de entrada. Su retorno depende en gran medida de la ocupación total del espacio y de la capacidad operativa para gestionarlo eficientemente.
1.2 Financiamiento y plazos
- Al financiar bodegas de mayor tamaño, los bancos o entidades crediticias suelen otorgar mejores condiciones (tasas más bajas o plazos más largos) porque el activo es de mayor valor. Aunque la mensualidad pueda ser alta, el costo relativo por metro cuadrado disminuye.
- Para bodegas pequeñas, los plazos de financiamiento suelen ser más cortos, y la tasa de interés, ligeramente superior, reflejando un mayor riesgo de impago ante carteras menos diversificadas.
Te puede interesar: ¿Es buena inversión invertir en una bodega como activo de una empresa?

2. Costos operativos y mantenimiento
2.1 Consumo energético
- Un espacio más grande implica mayor área de techos y muros, que se traduce en mayor consumo de energía (iluminación, climatización, sistemas de seguridad).
- Si tu operación no requiere ocupar la bodega en su totalidad, tendrás “áreas muertas” que igualmente generan gastos: iluminación básica para mantenimiento, vigilancia o control de plagas.
- Bodegas medianas (por ejemplo, 250–300 m²) permiten cubrir la demanda sin incurrir en demasiados espacios ociosos, reduciendo el gasto de energía en áreas no productivas.
2.2 Personal y equipos
- El tamaño de la bodega determina cuántos operarios y equipos (montacargas, estanterías móviles) necesitas.
- Bodegas pequeñas: Un operario puede atender la mayoría de tareas diarias (recepción, almacenaje y despacho).
- Bodegas medianas: Requieren, al menos, un equipo de dos a tres personas para garantizar una rotación ágil de inventarios y manejo de pedidos.
- Bodegas grandes: Implican contratar personal adicional (supervisor, choferes internos, auxiliares de almacén) y adquirir o rentar varios equipos de carga y software de gestión WMS para optimizar procesos. Esto aumenta costos operativos, pero si la bodega se usa a plena capacidad, el gasto unitario por m² disminuye.
2.3 Mantenimiento preventivo y corretivo
- Bodegas de gran envergadura: Sus techos a dos aguas o naves con doble altura requieren revisiones periódicas en zonas altas, mayor mano de obra para limpieza y reparaciones en mallas contra incendios, sistemas de rociadores y estructurales.
- Bodegas más compactas: El mantenimiento tiende a ser más sencillo y menos costoso, dado que hay menos superficie y menos altura que atender.
- Proyectos recomendados:
- En Ofibodegas en Zona 13 encuentras módulos de 200–300 m², ideales para operaciones que buscan mantener costos de mantenimiento en niveles bajos.
- Para quienes requieren 400–500 m² sin llegar a grandes extensiones, Ofibodegas El Naranjo (Mixco) ofrece opciones de ampliación contigua en la misma urbanización, permitiendo crecer de forma modulada.
3. Rendimiento de capital y tiempo de recuperación
3.1 Tasa interna de retorno (TIR)
- El retorno de la inversión (ROI) suele medirse a través de la TIR o del periodo de payback.
- Bodegas pequeñas: Al requerir menor inversión, su payback es más rápido si se dispone de un flujo constante de operaciones, aunque la TIR puede ser menor por precio por metro alto.
- Bodegas medianas: Ofrecen un equilibrio: inversión moderada y costos unitarios competitivos, con una TIR atractiva si la ocupación es cercana al 80–90 % en los primeros 2 a 3 años.
- Bodegas grandes: Requieren más tiempo de recuperación (3–5 años), pero la TIR a largo plazo puede superar a módulos pequeños si se aprovecha la totalidad del espacio o se generan ingresos extra por subarrendar secciones excedentes.
3.2 Generación de ingresos adicionales
- Comprando un espacio amplio, puedes subdividir internamente y vender o subarrendar fracciones:
- Un cliente que adquiera 800 m² en Carretera a El Salvador puede dedicar 600 m² a sus operaciones y subarrendar 200 m² a terceros, recuperando parte del costo de la inversión.
- En Ofibodegas en Amatitlán, donde los terrenos son más extensos, existe la posibilidad de construir naves modulares de 200 m² a 1,000 m², facilitando la combinación de uso propio y arrendamiento.
- Estos ingresos extras impulsan el retorno del capital y reducen el periodo de recuperación.
4. Flexibilidad operativa y requisitos de inventario
4.1 Rotación de inventarios
- El tamaño óptimo de bodega estará condicionado por el volumen y la velocidad de rotación de tu inventario:
- Si manejas productos de alta rotación y bajo volumen (ropa, repuestos pequeños), una bodega de 150–200 m² es suficiente y garantiza un buen ROI.
- Para industrias con productos voluminosos o estacionales (muebles, neumáticos, fertilizantes), necesitarás 400 m² o más para evitar congestión y garantizar separación de lotes.
- Una bodega sobredimensionada para inventario de baja rotación genera espacio ocioso que no aporta al flujo de efectivo.
4.2 Diversificación de productos
- Al comprar bodegas grandes, tienes la alternativa de destinar secciones a productos secundarios o líneas complementarias que diversifiquen el riesgo:
- Por ejemplo, en Mazatenango, Cocales, puedes adquirir 600 m² y usar 400 m² para tu línea principal, dejando 200 m² para productos de temporada o servicios de terceros.
- Esto reduce el impacto de estar atado a un solo tipo de mercancía y mejora la eficiencia de la bodega.
Te puede interesar: Estrategias para hacer crecer una bodega y cuidar los costos

5. Proyección de crecimiento y escalabilidad
5.1 Crecimiento a futuro
- Considerar las razones estratégicas para comprar una segunda bodega para expansión no solo implica tu demanda inmediata, sino también los pronósticos de crecimiento a 3–5 años.
- Si estimas duplicar tu volumen de operaciones, adquirir un espacio de 500 m² o más puede ser más rentable que comprar primero 200 m² y en 2 años mudarte a 500 m²:
- Evitas costos de reubicación, adecuación y pérdida de tiempo en el traslado.
- Sinergias de escala: negociar precio más bajo en la compra inicial y mejores condiciones de pago.
5.2 Módulos contiguos y ampliaciones
- Algunas ubicaciones (como El Naranjo y Zona 13) permiten adquirir módulos adyacentes para ampliar sin necesidad de cambiar de dirección.
- De esta manera, puedes iniciar con una bodega de 200 m² en El Naranjo y sumar otros 200 m² conforme aumenten tus ventas, evitando retrasos administrativos.
Conclusión
En definitiva, cómo afecta el tamaño de una bodega al retorno de la inversión depende de múltiples variables: inversión inicial, costos de operación, generación de ingresos adicionales, rotación de inventario y proyección de crecimiento. Elegir la medida adecuada implica equilibrar la urgencia de espacio con los beneficios de escala y la posibilidad de subarrendar o diversificar.
- Bodegas pequeñas (100–200 m²) ofrecen rápido retorno si tu operación es de bajo volumen.
- Bodegas medianas (200–500 m²) suelen tener el mejor balance entre costo por metro cuadrado y flexibilidad operativa.
- Bodegas grandes (500 m² en adelante) requieren más capital y tiempo para recuperarse, pero permiten ingresos extra y escalabilidad.
En Centro de Ofibodegas contamos con una amplia cartera de proyectos para que elijas según tus necesidades:
- Bodegas en venta en Carretera a El Salvador (desde 150 m² hasta 1,000 m²).
- Ofibodegas El Naranjo (Mixco) (módulos de 162 m² con posibilidad de añadir unidades colindantes).
- Ofibodegas en Amatitlán (lotes mixtos desde 200 m² hasta 1,000 m²).
- Ofibodegas en Cocales, Mazatenango (espacios de 300 m² a 800 m², techos altos y amplio patio de maniobras).
- Ofibodegas en Zona 13, Ciudad de Guatemala (módulos desde 200 m² hasta 600 m², con accesos controlados y seguridad 24/7).
¿Quieres conocer más y asegurar tu inversión?
Contáctanos en Centro de Ofibodegas para recibir información detallada, precios actualizados y coordinar una visita personalizada. Nuestro equipo de asesores está listo para ayudarte a elegir el tamaño óptimo de bodega y garantizar que obtengas el mayor retorno de tu inversión. ¡Agenda tu cita hoy y comienza a expandir tu negocio con la mejor infraestructura!